Se puede cambiar la personalidad
La personalidad se conforma de varios factores, endógenos y exogenos, la parte endogena es la información genética que traemos al nacer, y la exógena es lo que forma la personalidad en las primeros años de vida, las vivencias y mandatos recibidos. Esto hace que existan diferentes tipologias de personalidad. El agresivo, el tímido, el optimista, el pesimista, el miedoso, el dador, el egoísta y tantas otros rasgos que cuando tienen un grado mayor de importancia entra dentro de una de estas apologías, ya que todos tenemos o la personalidad normal tiene un porcentaje de todas las tipologías. El problema surge cuando uno o más rasgos se magnifican.
Es por esto que se debe ser cuidadoso con la formación del niño, los padres deben analizar su propia personalidad y tratar de no forjar en el niño los mismos rasgos que en realidad no les gustan de si mismos.
Padres muy temerosos por ejemplo harán que su hijo/a también lo sea. De igual modo cuando los padres tienen un alto contenido de agresividad se transmitirá al hijo.
La madre Teresa decía:
" NO IMPORTA QUE NO ME ENSEÑES, TE ESTOY VIENDO "
Si visualizamos el rasgo de la personalidad que no es adecuado seguramente, solo o con ayuda se podrá revertir.
